Un iceberg en pleno desierto fue el ambicioso plan que se anunció en 2019 y que no logró abastecerse en Emiratos Árabes. Un iceberg en un clima tan caluroso y árido parece ser parte de una escena de ciencia ficción futurista pero que se prometió como una solución a la sequía de estos territorios.
En estos sitios la falta de precipitaciones son una de las principales preocupaciones así la escasez de agua. En promedio, en los Emiratos Árabes las lluvias llegan a 120 milímetros anuales, por lo que este plan ambicioso tendría sentido si fuera viable. Es por esto que el empresario Abdulla Alshehi aseguró que era posible trasladar estas porciones de hielo e instalarlos en estos enclaves para continuar con este flagelo.
Cómo es el extraño proyecto de Abdulla Alshehi, para traer iceberg a Emiratos Árabes
«Será un proyecto más económico y ecológico para utilizar el agua de los icebergs no solo para los Emiratos Árabes Unidos, sino en todo el mundo», explicó en ese entonces el millonario que intentó explicar al mundo cómo sería este plan desopilante que tenía un objetivo claro. «Se realizó un impacto de evaluación ambiental, y muestra un impacto mínimo en el ecosistema, así como en el medio ambiente», aseguró en una entrevista para Euronews en ese momento.
El plan estaba bastante claro y contaba con trasladar una porción de iceberg antártico a la Ciudad del Cabo (Sudáfrica) o hasta Perth (Australia). La finalidad era noble y prometía concluir con el problema y las condiciones climáticas adversas en estas tierras. Para ello, se prometía abastecer de agua dulce y potable a cerca de uno millón de habitantes durante cinco años. «Según nuestro análisis, será más barato traer estos icebergs que usar agua desalinizada», aseguró el autor del proyecto que aseguró que invertiría entre 60 y 80 millones de dólares en este plan.
Traer un iceberg: la desopilante odisea para culminar con la sequía en el desierto
El bloque de hielo elegido para tal finalidad se encontraba en la Antártida e iba a ser identificado mediante un satélite que seleccionaría el pedazo que tendría alrededor de 2 kilómetros de largo por 500 metros de ancho. La idea fundamental de este plan es que estos iceberg puedan atraer la formación de nubes y humedad para provocar lluvias.
El viaje también sería una parte más de esta travesía con una complicación lógica para este tipo de proyectos: durante el traslado el hielo perdería gran parte de su masa. Sin embargo, todo estaba pensado para que esto no implicara más del 30% del hielo y se aplicaría un enorme arco metálico para evitar que se rompa por el camino y se derrita. La aventura del traslado se realizaría durante 8.800 kilómetros hasta las costas del emirato de Fuyaira, en el golfo de Omán, durante 10 meses.
El «turismo del iceberg», otro plan detrás de este curioso proyecto
Más allá de contribuir a lucha contra la sequía y la generación de lluvias, este proyecto también tenía otra finalidad turística que podría permitir la recuperación de la inversión millonaria y mantener cautivo a los turistas de este sitio concurrido. Esta idea no surgió solamente del empresario millonario Abdulla Alshehi.
En el año 1975 un grupo de científicos franceses se propusieron llevar icebergs a Arabia Saudita, un intento que terminó en fracaso por razones técnicas. «Aquí es donde empezamos», explicó el empresario, quien lleva luchando contra la sequía de los Emiratos Árabes durante seis años. Aunque la iniciativa tenía una finalidad práctica y amigable con el medio ambiente, este proyecto quedó en la promesa y aún no se conocieron cómo fueron los avances de este plan.
